Reiki, una Terapia Bioenergética
El REIKI es una técnica japonesa basada en la transferencia de energía curativa del terapeuta al paciente. La palabra Reiki define en si misma su significado pues significa Energía Universal de Vida. Los componentes de esta palabra tienen como definición en el alfabeto japonés rei (Universal, sin limites) y ki (Energía vital).
Qué es el Reiki cómo Terapia Bio-energética
El Reiki sostiene que el cuerpo por sí solo tiene los mecanismos para auto-curarse, sin embargo, en algún momento de nuestra vida el equilibrio energético se rompe y no tiene la capacidad de funcionar o está disminuido. La armonía y el equilibrio son dos conceptos altamente relacionados con la terapia y son esenciales para que se ponga en marcha el mecanismo de auto-curación. A este proceso hay que añadir la energía extra que aporta el Reiki, cuya frecuencia de vibración es muy alta y que permanece trabajando en el cuerpo del paciente por un periodo aproximado de 24 horas.
Estamos vivos porque la Fuerza Vital fluye por nosotros. La Fuerza Vital fluye por el cuerpo físico por los caminos llamados chakras, meridianos y nadis y a nuestro alrededor por un campo de energía llamado aura. La Fuerza Vital alimenta a los órganos y células del cuerpo, manteniéndolos en sus funciones vitales. Cuando se interrumpe el flujo de esta Fuerza Vital provoca una función disminuida en uno o varios órganos y tejidos del cuerpo físico.
La Fuerza Vital es también la energía de nuestros pensamientos, emociones y sentimientos. Se interrumpe cuando aceptamos, conciente o inconscientemente, pensamientos o sentimientos negativos sobre nosotros mismos. La negatividad es energía de menor frecuencia por lo tanto cuando estos pensamientos y sentimientos negativos se unen al campo de energía causan una ruptura en el flujo natural de la Fuerza Vital. Esto disminuye la función vital apropiada del cuerpo físico.
El Reiki aclara, refuerza y contribuye a curar los caminos de la energía, permitiendo así que la Fuerza Vital fluya de una manera sana y natural.
Utilidad del Reiki como terapia.
La concepción holística e integradora del Reiki, que considera que se deben trabajar conjuntamente cuerpo, mente y espíritu (emociones) puesto que en el ser humano hay una interacción e interdependencia entre todos los planos de su ser y lo que le rodea. Actualmente la ciencia está presentando diversos modelos de realidad que convergen con los descubrimientos de antiguas tradiciones espirituales.
En el campo de la medicina y la biología está sucediendo lo mismo, como la de la medicina energética (cuyos ejemplos los tenemos en la acupuntura o en la homeopatía), o la de la terapéutica vibracional (como en los remedios florales de Bach o la cromoterapia). Estas modalidades de terapias alternativas se corresponden a la enseñanza tradicional sobre los cuerpos sutiles (etérico, energético) del ser humano. Así mismo, la psicología y la psiquiatría son terapias que intervienen en el cuerpo mental y emocional de la persona.
A medida que empezamos a estar en contacto con la energía Reiki comenzamos a sentirnos con pilas, más creativos, con ganas de hacer muchas cosas. Es como si nos volvieran las ganas de vivir.
Viejos bloqueos comienzan a liberarse y nos volvemos más expresivos. No es el miedo lo que lo que nos motiva sino la alegría.
Nos liberamos fácilmente de conductas rígidas, y gracias al orden interno que comienza a producirse somos capaces de crear vínculos nuevos y más armónicos con los demás.
Conseguimos paz interior, nos equilibramos emocionalmente, mejoramos la autoestima y la confianza en nosotros mismos.
Pero hay algo más que se active con el contacto con la energía Reiki, y es la APERTURA DEL CORAZÓN. Esto produce cambios muy profundos en nosotros.
¿Cómo es una consulta de Reiki?
El terapeuta debe crear un ambiente relajado, de meditación pues conseguir la colaboración del paciente propiciará la sesión. Se acudirá con ropa cómoda que no apriete y que permita estar sentado o tumbado.
Es común que el terapeuta utilice elementos que ayuden a estar en un estado de consciencia elevada por ello puede proponer unos minutos, previos a la sesión de Reiki en si misma, de meditación, ejercicios Tao, de desbloqueo energético, respiración, canto o posturas de Yoga.
El terapeuta trabaja con las manos sobre el paciente en una actitud generosa y altruista, que le permitirá conectar en niveles profundos de claridad espiritual.
Las manos del practicante de reiki emiten vibraciones, qué disuelven los "nudos energéticos" que provocan esos bloqueos de energía en el paciente.
Durante la sintonía, el terapeuta visualiza como si un haz de luz penetrara por su coronilla, atravesara el corazón y fluyera hacia las manos que apenas rozan al receptor. Las manos estarán el tiempo necesario transfiriendo la energía sobre la zona afectada o sobre el chacra correspondiente. Cada mano puede tener una posición distinta. Reiki actúa de forma global cuando se aplica sobre cualquier parte del cuerpo, sin embargo parece de sentido común situar nuestras manos en los lugares que están afectados por una dolencia en particular o próximos a la región afligida.
Para el tratamiento a otra persona se dedica de tres a cinco minutos a cada una de las posiciones, lo que se supone una sesión de una hora, de comprobada eficacia para activar un proceso auto depurativo del cuerpo, si se realiza por cuatro días consecutivos, así se estimulan las defensas del organismo y su propia fuerza homeostática que lo pone de nuevo en equilibrio y armonía, tras el relativo periodo desintoxicante que seguirá naturalmente.
Crea o no la persona la energía fluye igual, la idea es qué vaya con mucho Amor, y así la persona recibirá el beneficio.
El final de la sesión es tomar consciencia conjuntamente de que el poder o energía generados durante la sesión tienen un fin determinado.
El Reiki puede aplicarse también como terapia de auto-sanación.
Beneficios del Reiki
CUERPO FÍSICO
Limpia, desintoxica, desbloquea, relaja. Estabiliza el sistema de autodefensa de nuestro cuerpo, refuerza el sistema inmunológico y reactivo nuestras fuerzas autocurativas.
También estimula el sistema glandular endocrino, llevándolo a un equilibrio armónico. Con el reiki se aceleran los procesos curativos, se calman los dolores, se refuerza la circulación y nuestro metabolismo comienza a recuperar su equilibrio. Los órganos internos y las glándulas se impregnan, en los tratamientos de Reiki, de energía luminosa, con lo que pueden volver a ejercer sus funciones naturales. A través de nuestros órganos excretores, (vejiga, intestino y piel) expulsamos impurezas y toxinas. Las impurezas que se han alimentado durante años comienzan a ser expulsadas de nuestro cuerpo. No nos asustemos si comenzamos a orinar mas seguido, de color oscuro y mayor olor, lo mismo ocurre con los intestinos. También por la piel nos empezamos a depurar, y no es raro ver que de repente nos “brotamos” o nos llenamos de ronchas que luego desaparecen. Con una limpieza tan a fondo se revitalizan nuestro cuerpo, los nervios se distienden y se relajan los músculos. Los nervios, anteriormente tensos, se vuelven más vitales. De repente, dormimos de un tirón y más profundamente. Nuestros ojos brillan más que antes y nuestra piel comienza a retomar su aspecto juvenil.
CUERPOS EMOCIONAL Y MENTAL.
Con los tratamientos Reiki se extiende por todo el cuerpo una benefactora relajación que produce tranquilidad y reduce el estrés.
Sentimientos reprimidos, no vividos o disimulados, como tristeza, dolor, ira, miedo, pero también alegría pueden volver a revivirse y poner en marcha un proceso de percepción sensible que a veces puede asustarnos. No es que vayamos a quedar de esa forma sino que se esta produciendo una purificación también en nuestras emociones.
También crece la comprensión sobre nuestras molestias y la confianza en nuestra propia intuición. Aprendemos a vivir mejor cada momento, sin dejarnos empujar ni avasallar.
Crece nuestra capacidad de asimilación, concentración y retención, y mejora nuestra memoria. Las estructuras de pensamiento rígidas se diluyen, y se cuestionan viejos principios. Esto nos motiva a hacer nuestra vida más flexible y creativa y a reunir valor para emprender nuevos caminos.
El Reiki siempre va a actuar en forma global, en todos los niveles, incluso aunque no lo percibamos en forma simultánea. Lo más importante es que el Reiki fluye hacia las raíces de nuestro malestar, dependiendo de qué nivel necesite purificación.
LA EXPRESIÓN FÍSICA DE LOS PROBLEMAS ANÍMICOS.
Los sentimientos reprimidos o no vividos se quedan anclados energéticamente. Estos sentimientos no expresados producen trastornos que se expresan en nuestro cuerpo físico en forma de síntomas o directamente enfermedades.
Es muy importante entender en forma global los síntomas de nuestras enfermedades porque si comprendemos la verdadera historia de su origen y aceptamos sus conexiones psicosomáticas es muy probable que podamos disolver el síntoma. Muchas veces los síntomas son pedidos de auxilio que hace el cuerpo cuando nos hemos salido de la unidad cuerpo-alma-mente/emociones. Un síntoma o una enfermedad nos muestran que hay algo de nuestra vida que debemos cambiar, y que hemos descuidado. Debemos escuchar el lenguaje de nuestro cuerpo y nuestra voz interior. De esta forma, muchas veces le decimos a nuestro cuerpo “no me molestes”, buscamos una buena medicación y no queremos enterarnos de que es lo que ese malestar nos esta mostrando. Por lo tanto, convivimos con jaquecas, tensiones musculares, molestias circulatorias, nerviosismo, irascibilidad o dependencia al trabajo.
El Reiki es una energía de luz que ayudará a solucionar estos bloqueos, aunque no siempre esto puede suceder de inmediato. A veces, se necesitan varias sesiones para eliminarlos o para ver claramente qué es lo que debemos cambiar de nuestra vida para eliminar determinado síntoma.
Podemos decir que "estamos sanando el pasado", hemos construido un “modelo” de vida personal que funciona según que resumen hayamos hecho de las experiencias positivas y negativas vividas en el pasado. Y muchas veces, este modelo o plan de vida no nos hace felices porque responde a influencias negativas que recibimos. Todas las experiencias negativas que hayamos vivido en nuestra primera infancia, como miedo y dolor, abandono, descuido, aislamiento, sentimiento de inferioridad, humillación, desengaño, etc. Nos causan bloqueos que no dejan desarrollar nuestra vida de una forma armónica y plena.
VIRTUDES DEL REIKI.
- Acelera y refuerza el proceso de autocuración del cuerpo.
- Aumenta la energía vital.
- Estabiliza las emociones.
- Restablece la armonía psíquica y el bienestar del alma.
- Disuelve bloqueos y produce una profunda relajación.
- Ayuda a eliminar toxinas e impurezas.
- Da paz interior.
- Nos conecta con la alegría y la felicidad.
- Nos da lucidez y creatividad.
Punto de vista ortodoxo sobre el Reiki en su aplicación como sanación bioenergética
El Reiki no tiene contraindicaciones, pero, como toda práctica de alto nivel (por ejemplo las meditaciones Tantra o Tao), sería absurdo ponerle obstáculos mezclándola con remedios menores que supongan mensajes limitantes al subconsciente. Por tanto, las terapias vibracionales funcionarán a favor del tratamiento Reiki, y los medios alopáticos por lo menos contarán con un colchón de protección y apoyo con el Reiki para reducir sus efectos secundarios.